Estamos bajo una dictadura estilo NAZI proclamada por la OMS y seguida por los gobiernos títere del mundo:
Campos de concentración: Encierros en sus propias casas, localidades o poblaciones, pérdida de la libertad de movilización
Prohibición de reuniones de ciudadanos: Bajo el pretexto de que no haya “aglomeración” para que no se transmita un virus que NO ha sido aislado, la libertad de reunión ha sido suprimida.
Marcas de sumisión: Tapabocas inútiles que pueden causar graves daños al usuario por respirar los químicos nocivos del tapabocas (cáncer) o por falta de oxígeno (daño cerebral) y que además sirven para demostrar la sumisión de la población y el control del estado totalitario.
Operaciones psicológicas de control: Enfermedad psicogénica masiva inducida por medios de comunicación, “enfermos asintomáticos”, o sea estar enfermos sin estar enfermos.
Terrorismo de estado: Amenazas con multas y cárcel a quien se oponga a estas medidas totalitarias.
Censura Total: Todos los medios de comunicación y las redes sociales están censurando cualquier noticia que vaya contra las mentiras oficiales.
Operación de falsa bandera: Hitler quema el Reichstag para instalar una dictadura, los demócratas organizan la invasión del Capitolio para culpar a los partidarios de Trump e instalar a un presidente fraudulento.
Estado policiaco: Fuerzas del estado desplegadas para obligar a cumplir medidas que van contra nuestros propios intereses y salud.
Solución final: Vacunas que secuestran el ADN de las células para que el cuerpo se ataque a sí mismo, produciendo incapacidad total o la muerte. Quieren vacunar toda la población mundial con una falsa vacuna, lo cual se convertirá en el mayor genocidio en la historia de la humanidad. Los nazis ganaron la guerra.